Colonia, 10 de octubre de 2017.
Presidente de la Junta Departamental
Edil Emilio Della Santa
Presente.
De nuestra consideración:
Los abajo firmantes, integrantes de la Comisión de Cultura, Deportes y Juventud, presentamos adjunto, exposición de motivos, plano y proyecto de decreto tendiente a designar a las calles innominadas aledañas a la calle “China” Zorrilla, que fuera nominada recientemente por este Cuerpo.
Por tal motivo, se propone que la primera paralela a “China” Zorrilla hacia el noroeste se llame Margarita Xirgú y a la primera paralela a Camino del Medio hacia el oeste Carlos Páez Vilaró.
Sin otro particular, saludan atte., MARÍA JOSÉ GARCÍA – AGUSTÍN CALLERO -MARÍA ESTELA GONÇALVES – MIRTHA PACHECO – MÓNICA RIVERO – GERÓNIMO OLMANDO.
Margarita Xirgu Subirá.
(Molins de Rey, 18 de julio de 1888 – Montevideo, 25 de abril de 1969) Fue una actriz española asociada especialmente con las obras de García Lorca. Exiliada durante la dictadura franquista, tomó la nacionalidad uruguaya. También se dedicó a la dirección e interpretación teatral.
Nació el 18 de julio de 1888 en la localidad catalana de Molins de Rey, en la provincia de Barcelona. Hija de Pedro Xirgu y Martí y Josefa Subirá Polls, cuando cumplió ocho años su familia se instaló en Barcelona. En 1900 empezó a trabajar en un taller de pasamanería y se aficionó al teatro en la sede del Ateneo (Distrito V) de Barcelona, al que era asiduo su padre. En 1902 debutó como aficionada en el Salón Asiático de Barcelona con la obra Lo nuvi, de José Feliú y Codina. Un año más tarde actuó en Don Álvaro o la fuerza del sino, de Ángel de Saavedra, en el Ateneo del distrito quinto.
En 1905 le diagnosticaron una enfermedad pulmonar. No obstante, empezó a colaborar con “Gent Nova” de Badalona. En noviembre de 1906 fue contratada por primera vez para actuar en el teatro Romea de Barcelona en el papel de Blanca en la obra Mar y Cel, de Ángel Guimerá. En 1907 falleció su padre y Margarita se hizo cargo de la familia.
En septiembre de 1910 se casó con Josep Arnall, quien moriría en La Habana en 1936. Margarita volvió a casarse cinco años más tarde con su amigo Miquel Ortín, del que ya no se separaría.
En 1905 le diagnosticaron una enfermedad pulmonar. No obstante, empezó a colaborar con “Gent Nova” de Badalona. En noviembre de 1906 fue contratada por primera vez para actuar en el teatro Romea de Barcelona en el papel de Blanca en la obra Mar y Cel, de Ángel Guimerá. En 1907 falleció su padre y Margarita se hizo cargo de la familia.
En septiembre de 1910 se casó con Josep Arnall, quien moriría en La Habana en 1936. Margarita volvió a casarse cinco años más tarde con su amigo Miquel Ortín, del que ya no se separaría.
Actriz profesional
Comenzó su labor como actriz en grupos de aficionados desde niña y debutó profesionalmente con la compañía de Josep Santpere. En 1910 formó su propia compañía, y estrenó, entre otras, las obras Andrónica y La reina joven en el Teatro Romea de Barcelona, lo que le granjeó un gran prestigio en la escena catalana.
Entre 1909 y 1916 intervino en algunas películas, y tras esa experiencia no volvió a ponerse ante una cámara más que en una ocasión, en 1938, con el filme argentino Bodas de sangre.
En 1914 dio el salto a Madrid, donde trabajó en el Teatro Español, interpretando obras de Valle-Inclán (estreno de Divinas palabras, 1933), George Bernard Shaw, Gabriele D’Annunzio, Alejandro Casona (La sirena varada, 1934) y Federico García Lorca, del que fue asidua colaboradora, pues el poeta de Fuente Vaqueros estrenó casi todas sus obras importantes con ella: Mariana Pineda, con decorados de Salvador Dalí (1927); La zapatera prodigiosa (1930), Yerma (1934), Doña Rosita la soltera o El lenguaje de las flores (1935) y el reestreno de Bodas de sangre (1935), con escenografía de Caballero.
En 1933 consiguió actuar en el Teatro romano de Mérida, marcando el comienzo del Festival de Teatro Clásico de la capital extremeña.
Comenzó su labor como actriz en grupos de aficionados desde niña y debutó profesionalmente con la compañía de Josep Santpere. En 1910 formó su propia compañía, y estrenó, entre otras, las obras Andrónica y La reina joven en el Teatro Romea de Barcelona, lo que le granjeó un gran prestigio en la escena catalana.
Entre 1909 y 1916 intervino en algunas películas, y tras esa experiencia no volvió a ponerse ante una cámara más que en una ocasión, en 1938, con el filme argentino Bodas de sangre.
En 1914 dio el salto a Madrid, donde trabajó en el Teatro Español, interpretando obras de Valle-Inclán (estreno de Divinas palabras, 1933), George Bernard Shaw, Gabriele D’Annunzio, Alejandro Casona (La sirena varada, 1934) y Federico García Lorca, del que fue asidua colaboradora, pues el poeta de Fuente Vaqueros estrenó casi todas sus obras importantes con ella: Mariana Pineda, con decorados de Salvador Dalí (1927); La zapatera prodigiosa (1930), Yerma (1934), Doña Rosita la soltera o El lenguaje de las flores (1935) y el reestreno de Bodas de sangre (1935), con escenografía de Caballero.
En 1933 consiguió actuar en el Teatro romano de Mérida, marcando el comienzo del Festival de Teatro Clásico de la capital extremeña.
Exilio en Sudamérica
Poco antes del inicio de la Guerra Civil Española emprendió una gira por Sudamérica con obras de Lorca. En 1937 hizo Yerma y Doña Rosita en el Teatro Odeón de Buenos Aires. En 1938 actuó en la película argentina Bodas de sangre, dirigida por Edmundo Guibourg.
Con el triunfo franquista en 1939 se exilió, viviendo tanto en Chile como en Uruguay y en Argentina. En 1945 estrenó en el Teatro Avenida de Buenos Aires el último drama de Lorca, La casa de Bernarda Alba.
En Montevideo representó obras de autores españoles y obtuvo el cargo de directora de la Escuela Municipal de Arte Dramático (EMAD) en 1949. Junto a ella se formaron actores de la talla de Amelia de la Torre, Cándida Losada, Enrique Diosdado, Alberto Closas y Sancho Gracia. Actuó y dirigió en la Comedia Nacional de Uruguay en el Teatro Solís de Montevideo a la joven China Zorrilla en Romeo y Julieta, Sueño de una noche de verano y Bodas de sangre.
Obtuvo la nacionalidad uruguaya, compró una casa en el balneario de Punta Ballena, en Maldonado y permaneció en Uruguay durante sus últimos veinte años de vida.
En Montevideo la Escuela Multidisciplinaria de Arte Dramático (la cual dirigió desde su fundación en 1949 hasta 1957) lleva su nombre.
Poco antes del inicio de la Guerra Civil Española emprendió una gira por Sudamérica con obras de Lorca. En 1937 hizo Yerma y Doña Rosita en el Teatro Odeón de Buenos Aires. En 1938 actuó en la película argentina Bodas de sangre, dirigida por Edmundo Guibourg.
Con el triunfo franquista en 1939 se exilió, viviendo tanto en Chile como en Uruguay y en Argentina. En 1945 estrenó en el Teatro Avenida de Buenos Aires el último drama de Lorca, La casa de Bernarda Alba.
En Montevideo representó obras de autores españoles y obtuvo el cargo de directora de la Escuela Municipal de Arte Dramático (EMAD) en 1949. Junto a ella se formaron actores de la talla de Amelia de la Torre, Cándida Losada, Enrique Diosdado, Alberto Closas y Sancho Gracia. Actuó y dirigió en la Comedia Nacional de Uruguay en el Teatro Solís de Montevideo a la joven China Zorrilla en Romeo y Julieta, Sueño de una noche de verano y Bodas de sangre.
Obtuvo la nacionalidad uruguaya, compró una casa en el balneario de Punta Ballena, en Maldonado y permaneció en Uruguay durante sus últimos veinte años de vida.
En Montevideo la Escuela Multidisciplinaria de Arte Dramático (la cual dirigió desde su fundación en 1949 hasta 1957) lleva su nombre.
Carlos Páez Vilaró.
(Montevideo, 1 de noviembre de 1923 – Punta Ballena, 24 de febrero de 2014) fue un pintor, ceramista, escultor, muralista, director, escritor, compositor y constructor uruguayo.
Con 18 años viajó a Buenos Aires en 1941, para trabajar en una fábrica de fósforos y luego, en el sector de las artes gráficas. A los 20 años regresó a Montevideo donde, impactado por las comparsas de los barrios Sur y Palermo, y por el conventillo Mediomundo donde se estableció, se vinculó a la comunidad afrouruguaya y comenzó a colaborar en la preparación del desfile de llamadas, interiorizándose en el folclore afrodescendiente. A partir de este acercamiento realizó varias obras pictóricas mostrando distintos aspectos de la cultura y de la vida cotidiana del afrouruguayo: llamadas, bailes, religiosidad, casamientos, nacimientos, velorios, etc.
Formó parte del Grupo de los 8, agrupación de artistas plásticos uruguayos que surgió en 1958, integrada también por Oscar García Reino, Miguel Ángel Pareja, Raúl Pavlovsky, Lincoln Presno, Américo Sposito, Alfredo Testoni y Julio Verdie, quienes sumaron fuerzas para incentivar el arte del momento en sus vertientes más experimentales. En 1960 expusieron junto a artistas como Willem De Kooning, Roger Hilton y Lucio Fontana en la gran exposición internacional del Museo de Arte Moderno de Buenos Aires, invitados por su creador y director, el crítico y poeta Rafael Squirru.
Gracias al contacto con escritores, músicos e investigadores como Ildefonso Pereda Valdés, Paulo de Carvalho Neto, Jorge Amado y Vinicius de Moraes publicó libros como La casa del negro, Bahía, Mediomundo y Candango. Profundizó sus investigaciones sobre la cultura afrodescendiente desde Salvador de Bahía y cada uno de los países americanos donde está presente (Colombia, Venezuela, Panamá, República Dominicana, Haití, etc.) a los países del África negra. Colaboró con Albert Schweitzer en el leprosario de Lambaréné, Gabón.
Se casó en 1955 con Madelón Rodríguez Gómez y se divorció en 1961. Con ella tuvo tres hijos: Carlos Miguel, Mercedes y Agó. En 1989 se casó con Annette Deussen, y tuvieron tres hijos: Sebastián, Florencio y Alejandro.
En 1958 empezó a construir Casapueblo la denominada por él mismo como una «escultura habitable» ubicada en Punta Ballena a 13 Km de Punta del Este. Con el tiempo además de su hogar, el lugar se convirtió en taller y posteriormente también en museo y hotel, siendo uno de los atractivos turísticos del departamento de Maldonado en Uruguay. Según el propio Páez Vilaró “La construí como si se tratara de una escultura habitable, sin planos, sobre todo a instancias de mi entusiasmo. Cuando la municipalidad me pidió hace poco los planos que no tenía, un arquitecto amigo tuvo que pasarse un mes estudiando la forma de descifrarla.”
Una de sus obras más destacadas es un mural de 162 m que une la sede antigua de la Unión Panamericana con la moderna. Pueden encontrarse obras suyas en varios países: Argentina, Brasil, Chile, Estados Unidos, Haití, Panamá, en varios lugares de África y Polinesia, entre otros.
Además de la pintura incursionó en el cine en 1967, como coguionista de la película Batouk, dirigida por Jean-Jacques Manigot, largometraje de 35 mm en color de 65 minutos de duración. Los coguionistas fueron Aimé Césaire y Leopold Sedar Senghor que aportaron poemas. La película participó del Festival de Cannes de 1967.
También existen referencias a una película experimental titulada Une Pulsation, basada en una secuencia de imágenes tomadas por Carlos Páez Vilaró durante un viaje alrededor del mundo con su amigo Gérard Leclery, la película realizada en París incluía música de Astor Piazzolla. Según los autores del libro Le Grand Tango: The life and Music of Astor Piazzolla luego de la realización de dicha película, Piazzolla le hizo llegar a Páez Vilaró un casete con una nota adjunta “Gracias por la libertad que me has dado, me siento como un nuevo Piazzolla”.
El 13 de octubre de 1972, el avión Fairchild Hiller FH-227 de la Fuerza Aérea Uruguaya, se estrelló en la Cordillera de los Andes, con 45 personas a bordo, una de ellas era su hijo, de esta manera se vio involucrado en la denominada Tragedia de los Andes, a través de su hijo Carlitos Páez, que integraba el equipo de Rugby Old Christians, durante los 72 días que duró su desaparición fue uno de los líderes en la búsqueda de sobrevivientes. De dicha experiencia surge su libro Entre mi hijo y yo, la Luna.
Formó parte del Grupo de los 8, agrupación de artistas plásticos uruguayos que surgió en 1958, integrada también por Oscar García Reino, Miguel Ángel Pareja, Raúl Pavlovsky, Lincoln Presno, Américo Sposito, Alfredo Testoni y Julio Verdie, quienes sumaron fuerzas para incentivar el arte del momento en sus vertientes más experimentales. En 1960 expusieron junto a artistas como Willem De Kooning, Roger Hilton y Lucio Fontana en la gran exposición internacional del Museo de Arte Moderno de Buenos Aires, invitados por su creador y director, el crítico y poeta Rafael Squirru.
Gracias al contacto con escritores, músicos e investigadores como Ildefonso Pereda Valdés, Paulo de Carvalho Neto, Jorge Amado y Vinicius de Moraes publicó libros como La casa del negro, Bahía, Mediomundo y Candango. Profundizó sus investigaciones sobre la cultura afrodescendiente desde Salvador de Bahía y cada uno de los países americanos donde está presente (Colombia, Venezuela, Panamá, República Dominicana, Haití, etc.) a los países del África negra. Colaboró con Albert Schweitzer en el leprosario de Lambaréné, Gabón.
Se casó en 1955 con Madelón Rodríguez Gómez y se divorció en 1961. Con ella tuvo tres hijos: Carlos Miguel, Mercedes y Agó. En 1989 se casó con Annette Deussen, y tuvieron tres hijos: Sebastián, Florencio y Alejandro.
En 1958 empezó a construir Casapueblo la denominada por él mismo como una «escultura habitable» ubicada en Punta Ballena a 13 Km de Punta del Este. Con el tiempo además de su hogar, el lugar se convirtió en taller y posteriormente también en museo y hotel, siendo uno de los atractivos turísticos del departamento de Maldonado en Uruguay. Según el propio Páez Vilaró “La construí como si se tratara de una escultura habitable, sin planos, sobre todo a instancias de mi entusiasmo. Cuando la municipalidad me pidió hace poco los planos que no tenía, un arquitecto amigo tuvo que pasarse un mes estudiando la forma de descifrarla.”
Una de sus obras más destacadas es un mural de 162 m que une la sede antigua de la Unión Panamericana con la moderna. Pueden encontrarse obras suyas en varios países: Argentina, Brasil, Chile, Estados Unidos, Haití, Panamá, en varios lugares de África y Polinesia, entre otros.
Además de la pintura incursionó en el cine en 1967, como coguionista de la película Batouk, dirigida por Jean-Jacques Manigot, largometraje de 35 mm en color de 65 minutos de duración. Los coguionistas fueron Aimé Césaire y Leopold Sedar Senghor que aportaron poemas. La película participó del Festival de Cannes de 1967.
También existen referencias a una película experimental titulada Une Pulsation, basada en una secuencia de imágenes tomadas por Carlos Páez Vilaró durante un viaje alrededor del mundo con su amigo Gérard Leclery, la película realizada en París incluía música de Astor Piazzolla. Según los autores del libro Le Grand Tango: The life and Music of Astor Piazzolla luego de la realización de dicha película, Piazzolla le hizo llegar a Páez Vilaró un casete con una nota adjunta “Gracias por la libertad que me has dado, me siento como un nuevo Piazzolla”.
El 13 de octubre de 1972, el avión Fairchild Hiller FH-227 de la Fuerza Aérea Uruguaya, se estrelló en la Cordillera de los Andes, con 45 personas a bordo, una de ellas era su hijo, de esta manera se vio involucrado en la denominada Tragedia de los Andes, a través de su hijo Carlitos Páez, que integraba el equipo de Rugby Old Christians, durante los 72 días que duró su desaparición fue uno de los líderes en la búsqueda de sobrevivientes. De dicha experiencia surge su libro Entre mi hijo y yo, la Luna.
Decreto 003/2018
LA JUNTA DEPARTAMENTAL DE COLONIA
DECRETA:
Artículo 1º. DESIGNAR con los nombres: MARGARITA XIRGÚ a la calle innominada primera paralela a “China” Zorrilla hacia el noroeste, y CARLOS PÁEZ VILARÓ a la primera paralela al oeste del Camino del Medio que nace en Margarita Xirgú siendo perpendicular a “China” Zorrilla, en la ciudad de Colonia.
Artículo 2º. Dar cuenta e insertar en el Registro Informático de la Junta Departamental.
SALA DE SESIONES de la Junta Departamental de Colonia a veintiséis de enero de dos mil dieciocho.
EMILIO DELLA SANTA, Presidente.
CLAUDIA MACIEL RAIMONDO, Secretaria General.
Publicado Diario Oficial N° 29.895 de 27/02/2018.